La magia del orden en casa (y en el alma)

2/1/2025

Ahora sí, ya empezó el año, y aprovecho este espacio para desearte un gran año, que cada uno de nuestros días esté lleno de sentido y podamos encontrar paz y serenidad en cada circunstancia que se nos presente.

Este 2025 quiero iniciarlo compartiendo contigo mi vida como emprendedora, directora de Amates y, por supuesto, como diseñadora de interiores.

Pero también quiero que sea un lugar donde podamos conectar de manera más personal, por lo que encontrarás mucho más que diseño. Habrá reflexiones, recetas que me encantan, lugares que visito, cuentas que sigo, retos para crecer juntos y algunos aprendizajes que recojo en mi camino. ¡Espero que disfrutes leyéndolo tanto como yo disfruto creándolo!

Te quiero compartir algo que me hizo mucha ilusión en estos días de descanso. Cada año, Alfonso (mi esposo) y yo aprovechamos los días después de Navidad para ordenar closets, despensa, baños, cuarto de lavado, libreros y cajones, hacer reparaciones y desechar lo que no estamos usando. Empezamos con mucha flojera, pero en cuanto vemos los resultados del primer closet, se apodera de nosotros una obsesión y no podemos parar. Poco a poco vamos dejando nuestro departamento de revista… 😊 Y le pedimos a Dios que nos dure así todo el año.

Lo que les quiero compartir es la satisfacción que se experimenta al ver todo ordenado y en su lugar: la despensa organizada por secciones, así como la ropa que sí se usa, la que sí te encanta, el cajón del buró en completo orden… en realidad es muy emocionante.

Ordenar es el primer consejo que doy siempre. No podemos pensar en cambiar muebles o elementos decorativos si no ponemos primero orden en cada uno de nuestros espacios.

El orden es indispensable para lograr paz y serenidad; el orden en la vida es lo que nos salva: orden en nuestras prioridades y valores, en nuestras relaciones, en la distribución del tiempo y en todas las áreas de la vida, pero también en cada espacio de nuestra casa. Lo que se ve a primera vista, como el ingreso, la sala, el comedor, la cocina y aunque no parezca tan importante lo que no se ve, haz la prueba y ordena cada cajón de tu casa… y me dices si sentiste la magia que nosotros estamos experimentando en estos días de descanso, abriendo espacio para darnos cuenta de que necesitamos menos.

Gracias por ser parte de mi camino. Estoy muy emocionada por lo que viene y por compartir esta nueva etapa.